Controla las dislipemias. En primer lugar, es efectiva para bajar los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre.
Buena contra la litiasis y para el corazón. Secundariamente, sirve para reducir y eliminar cálculos renales y biliares y para prevenir problemas cardiovasculares.
Elimina líquidos y toxinas retenidas. Gracias a sus propiedades diuréticas, es buena para desintoxicar el organismo y reducir los valores plasmáticos de creatinina y ácido úrico.
Calma la artritis y los dolores musculares. De allí que también alivia trastornos musculares y articulares relacionados con dichas sustancias.
Actúa como cicatrizante. Por último, favorece la cicatrización.